El folclore se reunió en honor a la Virgen de la Candelaria

Dalmiro Cuéllar fue la figura principal del festival folclórica que se desarrolló en la localidad de La Candelaria, con motivo de las fiestas patronales en honor a la Virgen de la Candelaria.

La convocatoria musical también contó con: Diableros de Orán, Matacos, Los Teuco, y Noe Aybar.
Las actividades arrancaron con una misa en el pueblo. Hubo procesión, y además desfile de gauchos, delegaciones y fuerzas vivas.
El destacado folclorista boliviano Dalmiro Cuéllar volvió a hermanarse con el pueblo de Salta. Su repertorio carpero y atrayente se abrió como un abanico en la cita de La Candelaria.
Dalmiro Cuéllar Ayala nació en San Juan de la Vertiente, municipio de Villamontes, Departamento de Tarija. Desde temprana edad empezó a despuntar el vicio de la música. “La verdad que yo me inicié en la danza, pero luego incursioné en varios conjuntos, hasta que finalmente decidí encarar mi carrera como solista. Luego de contar con la aceptación de mi gente, me vine a tierra argentina a buscar nuevos horizontes. Hace ocho años que recorro este país, que me abrió desinteresadamente los brazos. Ya estuve en tres ocasiones en el Festival Mayor de Cosquín y también en Jesús María. Soy un eterno agradecido por que siempre me trataron con mucho amor y respeto”, dijo el folclorista boliviano.
Christian Herrera acaba de emprender un nuevo proyecto artístico con Matacos. El mencionado, durante una década, fue la voz y el líder del grupo Matacos, que cuenta con amplia aceptación entre los amantes del folclore. “Intento imponer el sello musical y mi particular forma de expresarlo. Si tengo en claro mis raíces y las nuevas formas musicales, generando así una alternativa a la música popular argentina. Este proyecto es una alternativa nueva me he diagramado hacer de la música folclórica una forma de vida”, sostuvo Herrera.
Los Diableros de Orán es la marca registrada a través de la cual tres artistas canalizan su talento. Gastón, Ricky y Sebastián Córdoba, son un amoroso manojo de inquietudes en común. Por citar algunas, son hermanos, nacieron y se criaron en un hogar en el que la música formaba parte del oxígeno que respiraron a diario. Juntos asumieron el legado de Federico, su padre (Las Voces de Orán), de ser puente entre su pueblo y el horizonte y con sus voces acercarlo a los más remotos paisajes del mapa.
Sebastián Madrazo y Kike Gutiérrez, conforman Los Teuco, una fórmula que parece encaminarse a un sitio preferencial del folclore. El talento fortaleció el cimiento de esta construcción musical. Estos cantores fueron ovacionados en La Candelaria.