El mate es una infusión a base de yerba mate que une a todos los argentinos. Ya sea trabajando, en la plaza, con amigos, con familia: el mate esta siempre presente.
Los que suelen tener el rol de cebador saben la importancia de hacer un buen mate. Si bien cada uno tiene su técnica, existen algunos trucos que pueden llegar a potenciar la calidad de un mate.
Elegir la yerba
El mercado ofrece diversidad de marcas y blends de yerba mate, hay sabores suaves hasta los más intensos, con o sin hierbas medicinales, endulzadas o no. Lo recomendable es elegir la que más se acerque a los gustos de cada uno. También se puede crear una mezcla propia, juntando a la yerba con hierbas a elección u otros ingredientes como puede ser el coco o la miel.
Temperatura del agua
La temperatura óptima del mate es de 75ºC, ya que no quema la yerba.
Evitar mojar toda la yerba
La famosa montañita no es únicamente algo estético, sino que también hace que este rinda más. Si se moja toda la yerba es mas probable que se lave rápidamente. En cambio, hay que comenzar cebando los mates vertiendo el agua lo más cerca posible de la bombilla y cada vez que se vuelque agua al recipiente, la yerba que está seca irá alimentando, liberando, gradualmente, el sabor.
El que prepara, toma los primeros mates
El que prepara el mate, es quien toma los primeros mates ya que son los más amargos, fríos, y sirven para testear la temperatura justa y sabor. De esta manera el cebador sabrá, al tercer o cuarto mate, cuando está bien la temperatura y el sabor, y será el momento de pasarlo al invitado.
Evitar mover la bombilla
Una vez que se inicia el mate, se recomienda mover lo menos posible la bombilla ya que se puede tapar. También, al mover la bombilla la yerba seca que alimenta los mates, se moja mas rápido y el mate “rendirá” menos.
Cebar continuamente
Para poder mantener el sabor y asegurar un buen mate es importante cebar constantemente, dándole continuidad a la ronda para evitar que se enfríe el mate.
Por los Senderosde Argentina